"Entre vecin@s"

Nunca te has preguntado cómo son tus vecin@s. En una comunidad hay varios tipos, muy distintos y con cualidades diferentes. 

Aunque sea un poco sarcástica en algún que otro caso, voy a describirlos:

- El de la mascota:

Tiene uno o varios animales, un perro o un pájaro. Cuando tiene que sacar a su canino, sus necesidades las hace en la acera, o el ascensor apesta a perro mojado. Lógicamente, no todos los dueños son así.

De tener un canario o un loro, está piando todo el día y, de escaparse, puede aparecerte delante de la ventana en cualquier momento.

- El del niño pequeño:

Este es el típico ejemplo de una familia feliz y sus  hijos o hijas. De ser hijo único, grita a cualquier hora del día pidiendo caprichos, y no se calla hasta que no se los den. Si aumenta el número de niños, vienen por las tardes a tu casa para jugar contigo y así los padres descansar un poco.

- El amargado:

Vecino o vecina, normalmente mayor, que vive solo y no habla con nadie; excepto con las cucarachas de su sótano.

- El amable:

Aquella persona que parece sacada del cielo, siempre muy amable contigo, que intenta encontrar una solución  a todos tus problemas.

En Nochebuena te regala un reloj sin motivo alguno, y en Año Nuevo una cesta con licores y quesos.

Siempre te da las gracias y es muy educado.

- El de las fiestas:

Invita todas las noches a veinte personas a su casa. Hacen una fiesta a las tantas de la noche y acaban como acaban... Media hora después les aparece la policía delante de su puerta por exceso de volumen, acabando con una buena multa.

- El cotilla:

Está mirando por la ventana a los demás para ver si se entera de algo; tan obsesionado que se compra unos prismáticos para ver mejor. No te quita el ojo de encima y, a veces, parece un poco psicópata.

- Ese que se mete en todo:

Estás tranquilamente hablando con el del cuarto piso y el del primero se acerca; lo primero que hace es preguntar de qué estás hablando y, después de obtener información suficiente, se va a buscar otra presa.

- El ocupado:

Siempre está haciendo cosas y nunca tiene tiempo para hablar contigo, ni siquiera saludarte.

- El de los sábados:

Por las mañanas pone música clásica muy alta y despierta a los demás.

- El que parece que te sigue:

Parece que supiera tu horario muy al milímetro, porque hace exactamente lo mismo que tú, a la misma hora, como si te siguiera.

- El abogado:

De sucederte algo, íntimo o público, siempre está allí para ofrecerte sus servicios en caso de que lo necesites.

- El médico:

Tiene experiencia en medicina y, cuando sucede algo en el piso, siempre va a  ayudar.

- El policía:

Siempre está pendiente de que aparques bien el coche, no cometas fechorías o, simplemente, recicles adecuadamente.

- El tacaño: 

Tiene dinero por un tubo pero, cuando te invita  a tomar un té, siempre te pide que cojas un cubito de azúcar.

- El de las flores:

Todos los días metido en las plantas, flores y árboles del vecindario, acaba lleno de tierra, pendiente de tus tulipanes del comedor, y se enfada mucho si le rompes una ramita a sus preciosos, lindos y maravillosos bonsais.

- El enfermo: 

Habitualmente en el hospital o en casa con algún catarro. Lo puedes encontrar en el garaje con una mascarilla tosiendo o dando un paseo.

Ahora que ya conoces algunas de las categorías, ¿cómo clasificarías a tus vecinos?

 Mayra