lunes, 22 de octubre de 2018
viernes, 19 de octubre de 2018
"La sensatez infantil"
Un trabajo como el docente siempre da satisfacciones, a nivel de enseñanza, y ya no digamos a nivel personal.
Cuando has pasado dos años con una parte del alumnado, no te sorprenden porque ya los conoces hasta un punto realmente increíble: mirarlos ya es suficiente.
Con el que empiezas, y ya en su conjunto la totalidad, te levantan el ánimo cuando ves que: se van autoexigiendo cada día, están felices por el trato que tienes con alguien, hay quien asume su responsabilidad individual en determinados actos para evitar que no se incluya a los compañeros - lo que no es habitual...
Estoy hablando de valores, y más en una sociedad tan complicada como ésta. Detrás de cada uno hay madres y padres que los llevan a ser así.
¡UNA VERDADERA SUERTE TRABAJAR CON PERSONAS!
Genaro
"¡Recupérate pronto!"
Esperamos que estés mucho mejor y poderte ver bien muy pronto; recupérate para estar lo antes posible.
Tus desayunos son espectaculares, como de un restaurante cinco estrellas.
¡Te echamos mucho de menos! Estamos tristes con tu ausencia.
¡ERES UNA MUJER MARAVILLOSA!
viernes, 12 de octubre de 2018
"La ouija"
Es un juego terrorífico en el que invocas a un espíritu: escribes en una esquina de la tabla la palabra "sí", y en la potra "no", apagas las luces y enciendes lámparas o velas.
Acto seguido, colocas un vaso en centro, boca abajo; cada persona pone el dedo encima, le preguntas algo y se va moviendo.
Para acabar de jugar, tienes que cerrar la sesión diciendo unas palabras. A quien no lo hace así, al día siguiente le ocurren sucesos extraños: ve nubes negras, las estatuas lo miran...
La gente que se llama María no puede invocarlo porque es el nombre de una virgen, pero sí jugar.
(Lo mejor es no creer en este tipo de juegos)
Sara Habibi
"¿Cómo somos?" (II)
Soy un poco inteligente. pacífico con la gente por lo que intento hacer lo mejor para mí y para ellos.
Divertido,astuto, distraído y dormilón.
Me dan miedo las tarántulas y las serpientes venenosas.
Siento vergüenza cuando hablo delante del público o hacer el tonto por la calle.
De carácter fuerte, suelo enfadarme con todos.
Tengo un carácter alegre.
En casa con mi hermano me comporto muy mal porque siempre nos estamos peleando; pero nos queremos mucho.
A mi padre sólo lo puedo ver por la noche, así que espero muy impaciente a que llegue y, cuando entra, voy corriendo a darle un abrazo fuertemente.
Inteligente, amable, generoso, impaciente y muy sentimental. Cuando me tengo que poner histérico lo hago, sobre todo si intentan reírse de mí.
Me encantaría que el mundo fuese un lugar pacífico.
Además de inteligente, soy divertida, simpática, amable y cabezona.
No me gusta ver como pegan o insultan a mis amigos, así que siempre intento evitarlo; tampoco que lo hagan conmigo.
Me considero: honesto, respetuoso, extrovertido, amigable, olvidadizo y despistado, un poco miedoso y deportista.
Le tengo miedo a: las alturas, los pasillos, las atracciones de las ferias, el pabellón del colegio, las demostraciones de gente saltando de azotea en azotea y la hora de recoger un examen.
Me gusta: viajar, dormir, cocinar (aunque no sepa), y el deporte; salir al encerado de cualquier clase, las preguntas en test, los "tochos", tocar la flauta...
No me gusta: el fútbol, las visitas médicas, las piscinas públicas, el baile gallego, las camisetas de manga larga; utilizar una pizarra de tiza, escribir a lápiz...
Muy alegre, simpática y mentirosa.
Simpática, cariñosa e inteligente.
A veces me paso: un día casi rompí un móvil cabreándome.
De mayor me gustaría ser culturista.
Me considero un niño cariñoso, porque cuando estoy feliz me dan ganas de mimar a alguien; bueno porque tengo empatía por mis amigos y otras personas (con los desconocidos pocas veces); inteligente, me centro mucho y me esfuerzo; trabajador y ordenado a la hora del estudio; serio porque no soporto para nada una mísera broma; impulsivo y sincero porque digo lo primero que pienso cuando pasa algo y sin mentir.
A veces me paso: un día casi rompí un móvil cabreándome.
De mayor me gustaría ser culturista.
Me considero un niño cariñoso, porque cuando estoy feliz me dan ganas de mimar a alguien; bueno porque tengo empatía por mis amigos y otras personas (con los desconocidos pocas veces); inteligente, me centro mucho y me esfuerzo; trabajador y ordenado a la hora del estudio; serio porque no soporto para nada una mísera broma; impulsivo y sincero porque digo lo primero que pienso cuando pasa algo y sin mentir.
jueves, 11 de octubre de 2018
"¿Cómo somos?" (I)
Muy simpático, cariñoso, bueno, centrado y despistado, un poco escandaloso (a veces).
Me considero una niña buena, aunque reconozco que soy bastante vaga a la hora de trabajar.
Soy muy cabezona y me cuesta reconocer mis fallos algunas veces. Me despisto muchas veces porque en algunos momentos me aburro o se me pasan cosas por la cabeza como jugar con mis amigos y pintar.
Odio que me mientan, me defrauden y que se burlen de mí.
Soy alegre, todo el mundo me dice que estoy siempre sonriendo, pero cuando me enfado soy muy cabezona.
Inteligente, aunque a veces estoy en babia.
Me dicen mis padres que me tomo todo con demasiada tranquilidad y que tengo que espabilar.
Aunque no lo parezca, soy un niño muy tímido y vergonzoso; a veces un poco vago y perezoso, alegre, divertido y muy bromista; inquieto, me encantan los deportes y la aventura; muy curioso, siempre con ganas de saberlo todo.
Soy cabezota y lo que más me caracteriza es la poca paciencia que tengo, o eso es lo que dicen mis padres, "y creo que tienen razón...".
Sincero, un poco desorganizado, responsable y fiestero.
Intento ser respetuoso con mis compañeros y no me gusta cuando ellos no lo son conmigo.
He de reconocer que me ha resultado difícil responder a esta pregunta.
Siempre es más fácil hablar de los demás que de nosotros mismos.
Me considero buena persona, buen amigo, alguien en quien se puede confiar. Soy sensible, inquieto, nervioso, curioso, inteligente y trabajador. También soy competitivo, me gusta ganar pero limpiamente; no me gustan las trampas ni las injusticias. A veces soy despistado y desordenado por lo que recibo muchas broncas en casa. Reconozco que soy tímido y vergonzoso, aunque intento disimularlo y que no se note mucho. Me gusta agradar y que me digan y reconozcan lo que hago bien; por el contrario, me disgusta fallar y menos que me lo digan aunque sea por mi bien.
Después de todo esto, he de decir que soy muy sincero.
Me definiría como un persona: alegre, risueña, simpatica, amigable, empática, conciliadora, amiga de mis amigos, con algunos miedos, inquietudes, problemas. Y protestona.
Soy una niña tímida, vergonzosa, me cuesta mucho relacionarme con la gente, tengo poca confianza en mí, nerviosa y me considero perfeccionista.
En casa, cabezona, terca, un poco contestona, y no hago todo lo que me mandan.
Fuera, me escondo detrás de mis padres para que no me vean; si me preguntan algo, contesto muy bajito y me pongo roja.
Me dan pánico las arañas y siempre miro si hay cuando me voy a dormir.
Por las noches soy muy miedosa, es como si en mi cabeza tuviese el miedo interno; pienso que hay gente en mi casa y van a hacer algo conmigo. En cambio, de día no tengo miedo a nada.
Le tengo vergüenza a casi todo, incluso ver a la gente por primera vez, quedarme en ridículo y a cuestiones muy tontas.
No consigo estar sin ducharme durante un día.
¡Soy muy aventurera!
Soy simpática, divertida, dulce, cariñosa con mis amigas y familia. Me gusta compartir y ayudar a los demás porque soy generosa y amable.
También me mola ser activa, hago gimnasia rítmica en mi casa.
Y lo más importante de todo es que:
¡Soy feliz y nunca dejo de soñar!
Soy simpático, amigable y agradable. Disfruto riéndome, me disgusta estar callado o aburrido.
Me gusta estar con mis amigos y aprender continuamente. Muchas veces me bloqueo por timidez o vergüenza.
Tengo miedo a la oscuridad, a las arañas y a los monstruos.
"Unha noite monstruosa"
Unha noite de Samaín convertinme en monstro. Era grande, forte, peludo e verde. Tiña dúas cabezas, cada unha con tres ollos, dúas grandes bocas e cornos.
Saín á rúa disposto a asustar a todo o que me encontrase, xa que era moi feo, eu mesmo asusteime a primeira vez que me mirei ao espello.
Cando xa asustara a varias persoas vin a uns nenos moi tristes e aburridos sentados nun banco, achegueime moi amodo para que non sospeitaran e poder asustalos. A sorpresa foi que non fuxiron, nin berraron, se non que me dixeron: "Ti si que das medo, o teu disfrace si que mola!"
Con isto entendín por que non os asustara antes, xa que pensaban que non era un monstro, que era unha persoa disfrazada.
Contáronme que estaban así porque os seus disfraces non atemorizaran a ninguén e todos ríanse deles. Pensei que se os acompañaba acabaría co problema; así que llo dixen e fomos en busca de xente, a idea foi un éxito. Asuatamos aos: caxeiros da tenda de chuches, aos seus pais, aos bombeiros...
Cando mellor o estaba pasando, soou o espertador e esperteime, todo fora un soño.
Alex
miércoles, 10 de octubre de 2018
"La flor Celeste"
Esta fue la primera flor en trasladarse de un sitio a otro. Todo comenzó con un sueño: ser mariposa y por fin volar.
Aunque su familia y amigos le dijeron que era estúpido, ella nunca se rindió.
Fue a muchas ciudades, conoció a miles de mariposas y de flores, pero hubo alguien que destacó: una mariposa llamada Primavera, con la que hizo amistad.
Siendo felices, apareció Invierno, la que más odiaba, y ambas le dijeron:"Vete de aquí, no eres bienvenida".Marchó y no se sabe a dónde.
Se hizo famosa porque alguien la ayudó a trabajar en los informativos de la televisión, y desde ese momento fue una leyenda animal.
Lola
"Hoverboard"
Es una especie de patinete eléctrico para desplazarse, en el que puedes ir de pie o sentado con un accesorio. Mantienen el equilibrio por un giroscopio.
Pueden ser de varios colores, de distintos tamaños, algunos tienen bluetooth para escuchar música, otros poseen luces de colores y algunos más rápidos que otros.
Hay que tener precaución porque, aunque son juguetes, pueden alcanzar mucha velocidad y tener un accidente, como me pasó a mí.
Muchos de mis amigos lo tienen. El mío es de color azul a juego con mi silla. Me lo regalaron mis padres por una buena acción.
Ariana
martes, 9 de octubre de 2018
"Si yo fuera un monstruo..."
Me gustaría ser una vampira. Tendría unos colmillos largos y afilados. Llevaría un vestido negro corto y una capa negra y rosa.
Podría volar, tener una velocidad terrible, superfuerza y muchos poderes más.
Sería buena, no chuparía sangre, sólo asustaría a los malos: ¡SERÍA UNA HEROÍNA!
Al poder volar, iría a varios lugares: París, Nueva York y Londres, por ejemplo.
Mis amigos serían otros vampiros, jugaríamos al pilla pilla volando y a una guerra de poderes.
¡Espero que os haya gustado esta historia!
Sara Lago
"Pesadilla en Halloween"
Soy Oimovik, un monstruo de mediana edad, con el pelo pincho, nariz extragrande, ojos microscópicos y boca que me cubre casi toda la cara; tengo el cuerpo recubierto de pelo y soy de color naranja.
En Halloween cojo a los niños, los minimizo, los meto en mi puño y los agito.
Voy de casa en casa haciendo estropicios en las cocinas: echo en una mesa catorce kilos de harina, intercambio los grifos, atasco los fregaderos...
Me gusta gastar bromas pesadas a la gente rica.
Cuando finaliza el día me tomo mi bebida favorita: "Tutishplash", una mezcla de jugo de calabaza con agua de mar y un chorrito de anís.
Manuel
"The shadow of black"
Así me llamo, soy un monstruo malo, una sombra con forma de libro. Salgo de noche volando por las casas de mis víctimas, pero una de las preferidas es la de Genaro. Voy allí para asustarlo con pesadillas cuando está durmiendo. Así, al día siguiente, por pasar mala noche, saca a todos al encerado.
Sin embargo por el día soy bueno y de mis hojas caen lágrimas cada vez que un libro no es leído, que se convierten en chuches para que todos queden hipnotizados cada vez que leen uno.
Ariana
"Una fuente peligrosa"
El día anterior a Halloween fui a cenar fuera y a dar un paseo con mi familia.
Caminando me entró sed, así que me acerqué a una fuente en la que había el siguiente letrero: "Agua no potable", pero no me enteré.
Durante el resto de la noche no sentí nada, hasta que llegó el día siguiente. Al despertarme e ir al baño, me di cuenta de que medía cuatro metros, pesaba 200 kilos y mi cuerpo estaba repleto de pelo.
Mi familia no me reconocía, por lo que estaban muy asustados.
Al echarme de casa me tuve que refugiar en un callejón. Sólo salía por la noche para que la gente pensase que se trataba de un disfraz.
No paraban de pedirme fotos y decirme que había sido muy original, a lo que yo no respondía para que no sospecharan.
Por suerte, al día siguiente volví a ser un niño normal.
Ricardo
"El club monstruoso"
En mi mundo hay monstruos y humanos, éstos son buenos; la otra parte, como yo, aunque lo seamos, nos toman por lo contrario, o por leyendas humanas o por personajes que nos hacen quedar mal.
Cierto día se me ocurrió montar un club para los nuestros, con el fin de hablar y de no avergonzarnos de nuestra raza.
De una tranquilidad inicial, empezó a coger fama: "Las paredes escuchan"; empezó a venir gente, parecíamos famosos y ya no éramos malos.
Poco tiempo después podíamos salir a calle, se terminaron las diferencias y se logró la igualdad.
Iker
"Estampas"
Soy un monstruo, os voy a contar mi historia en una noche del 31 de octubre.
Estaba jugando con mis amigos al tenis y de pronto escuchamos unas risas de unos niños que se acercaban; como no nos podían ver, nos fuimos a esconder detrás de unos árboles.
Una vez pasaron de largo, quisimos volver, pero no nos dimos cuenta: faltaba un niño por pasar...
Llegó a nuestra zona y empezó a sacar fotos, estábamos nosotros más asustados que el humano. Le pedimos que guardase silencio y no comentase nada; como era un sinvergüenza, quería contárselo a todo el mundo; sólo aceptó a cambio de que bailásemos el "swish-swish". No nos quedó otro remedio.
Ana Pereira
lunes, 8 de octubre de 2018
"Que boíños somos no Samaín!"
Eu faría o seguinte: asustaría á xente para que sufra, secuestraría... E así todos os anos ata a morte.
De día, convertiríame en...
Germán
Sería un monstruo con: la cabeza verde de Frankenstein, el tronco blanco de momia y las extremidades transparentes de fantasma.
Asustaría a las personas, a mi hermano para que me tuviese miedo...
La gente no dejaría de sacar fotos y ponerlas en cada esquina.
Tendría dos amigos: Fantásmica y Brujánica, un fantasma y una bruja con forma de canica.
Nos encanta dar sustos a todo el que pillamos.
Laura
Obligaría a alguien para que bailase en mitad de la clase.
Por las noches, siendo invisible, me escondería y me metería con todos: ¡Sería imperceptible para el ojo humano!
Me encantaría: tirar los objetos por la ventana, hablar con vampiros, volver al pasado para ver a los dinosaurios... E ir al futuro para visualizarme, además de conocer a mis hijos y a mi mujer.
Piero
Si fuera un monstruo...
Iría por ahí tan tranquila. Cuando viera a un abusón lo asustaría; y salvaría a los demás ciudadanos de mis compañeros.
Querría asustar bien de verdad, así como portarme bien en sociedad.
De tener hambre, me comería a alguien muy grande.
Mi afición preferida sería el claqué, para lo que tendría que comprar un bastón, un gorro y unas botas.
Tendría un mono en casa; mi comida preferida serían calabazas terroríficas y espeluznantes.
Lola
Gustaríame: facer parpadear as luces das casas ás doce da noite, tirarlle moitos tomates aos disfraces, roubarlles caramelos aos máis pequenos, secuestralos e metelos nunha casa abandonada, asustar aos adolescentes e aparecer cunha careta de pallaso nas fiestras.
En canto á miña familia: á miña irmá levaríaa a un bosque con animas salvaxes, a unha curmá botaríalle sangue na súa roupa, ao meu tío tiraríao a unha fosa chea de arañas e serpes, e a outra tía meteríaa nunha casa encantada sen poder saír.
Ana Dos Santos
Un día estaba en una cafetería con un amigo. Bebimos agua en mal estado y nos convertimos en monstruos.
Íbamos asustando a todo el mundo. Genaro siempre se metía con nosotros, pero esta vez le toco a él.
Poco después, a otro le pasó lo mismo: ¡Ya éramos tres!
De tanto gritar, teníamos sed y fuimos a beber a donde nos envenenamos: ¡Nos hicimos más grandes! ¡Susto por aquí, susto por allá!
Hasta que se metieron con nosotros y, con la risa, nos volvimos humanos.
Sergio
Si yo fuera un fantasma, me gustaría esconderme en algún arbusto y cuando alguien pasara aprovechar para asustarlo.
No penséis que soy malo, pero en esta fiesta debo realizar hechos tremendos...
¡Ojo, recordad que esto sólo hago si soy un fantasma!
Samuel
Como monstruo, e encantaría: hacer amigos, jugar con ellos, defender a los demás con mis habilidades, explorar sitios nuevos, variar las comidas frecuentemente, estudiar para ser científico y crear inventos para mejorar la vida de los demás.
Luis
Gústalle comer: cabazas, fiestras, sillas mesas, paredes; roubarlle as chuches aos nenos, asustar aos pais e nais, encher as camas dos avós de carbón, e prender lume ás casas.
Sarah
Como monstruo, me encanta asustar a niños y adultos para fastidiarlos. Gracias a un reloj terrorífico me puedo transformar cuando quiera.
A las 24 horas salgo para ser una sombra y crear espectáculos terroríficos.
Murillo
sábado, 6 de octubre de 2018
"El monstruo insecto"
Habita en los bosques con: animales salvajes e insectos venenosos y cazadores.
Es una criatura sanguinaria que, en las noches con niebla, es lo peor para el ser humano. Asusta a la gente y luego los mata.
Como tiene mucha inteligencia, usa una máscara para que no lo reconozcan.
Le gusta comer carne cruda y órganos de personas; y hablar con: moscas, escorpiones y avispas.
RECORDAD: "¡NUNCA ENTRÉIS EN EL BOSQUE POR LA NOCHE!"
Murillo
miércoles, 3 de octubre de 2018
"Mi autobiografía"
Hola, me llamo Alejandro, vivo en O Temple (Cambre) y tengo diez años.
Llegué al mundo el 18 de febrero de 2.008 en el hospital materno infantil "Teresa Herrera" de A Coruña, y no paré de llorar hasta que oí la voz de mi madre en la sala de partos.
Justo ese día era el cumpleaños de mi tía Icíar y dice que nací para sacarle protagonismo, ya que según los médicos tenía que haber sido el cinco de dicho mes.
Era un bebé despierto y espabilado, con menos de un mes eché mi primera carcajada, con siete meses ya gateaba y con once andaba.
De uno a dos años era un terremoto, no paraba quieto y me encantaba ir al parque con mi moto de juguete. Dicen mis padres que hablaba mucho y bien para lo pequeño que era.
Con tres años empecé a ir al CEIP Plurilingüe "Graxal", donde he hecho muy buenos amigos y donde sigo estudiando.
También con esta edad me convertí en hermano mayor, nació Gael, al que quiero mucho y con el que me peleo a menudo.
Con cuatro años me inicié en el fútbol, "mi pasión", en el equipo del cole. Con seis me fui al Sporting Cambre, donde jugué durante tres temporadas y del que guardo muy buenos recuerdos, como cuando me dieron el trofeo de mejor jugador prebenjamín en el año 2.016. Desde hace un año juego en el C.D. Obrero de Oleiros, donde me tratan muy bien, estoy muy contento y he hecho muy buenos amigos.
Actualmente estudio 5º de Primaria. Me encanta la geografía, los deportes y pasar tiempo con mis amigos; aunque lo que realmente disfruto es estando con mi familia y viajar juntos.
"El hombre roca"
Es una persona u objeto muy listo y resistente. ¡Puede vivir más de mil años!
Con su larga vida, vio la existencia de los dinosaurios y del ser humano.
Le gustaría ser arquitecto u obrero, aunque parezca mentira.
Con su larga vida, vio la existencia de los dinosaurios y del ser humano.
Le gustaría ser arquitecto u obrero, aunque parezca mentira.
Sus comidas favoritas son: los cacahuetes, el cacao, el bambú, peces, y frutas como la granada, por ejemplo.
Los juegos que más le gustan: rompe bambú, chocolate derretido, tiro al a´rbol y destrucción de paredes.
Piero
"El árbol dragón"
Hace miles de años, en un frondoso bosque, vivía un malvado dragón que se divertía quemando árboles. Por lo que pronto convirtió aquel lugar en un desierto.
Todos los habitantes tuvieron que marcharse, porque sin árboles ni vegetación era imposible vivir.
Rápidamente supieron de la existencia de un brujo y juntos idearon un plan. Preparó uno de sus hechizos y fue en busca del animal. ¡La idea era convertirlo en un árbol!
Una vez que lo tuvo delante lo hechizó. Las raíces del árbol dragón se expandieron por todo el bosque y dieron vida a nuevas plantas.
Por fin, pudieron regresar a sus hogares y vivir felices para siempre sin preocuparse por ningún dragón.
Alex
martes, 2 de octubre de 2018
"Runy"
Es muy lindo, de color blanco con dos manchas negras.
Muy cariñoso, aunque a veces es un poco traste. Y muy feliz.
Le gusta comer salchichas, huesos, pienso y cualquier cosa... ¡Y dormir todo el día! A veces le da el típico arrebato y empieza a correr por toda la casa.
¡LO QUEREMOS Y ÉL A NOSOTROS!
Piero
lunes, 1 de octubre de 2018
"El sueño de Pablo"
Es un niño de nueve años que vive en Lugo con sus padres y sus cuatro hermanos.
Quiere cumplir su mayor sueño: volar como Icaria... Aún no se lo contó a nadie, lo está pensando.
Le encanta hablar con su oso de peluche, dialogan así:
- Se lo tendré que decir.
- Sí, hazlo. (Piensa que dice el muñeco)
De pronto aparece su madre por la puerta de su habitación:
- Hijo, dime cuál es tu mayor sueño.
- Mamá, no es otro que... ¡Volar como Ícaro!
- ¿Qué?, ¿estás loco?
- Puede ser...
- ¿Cómo vas a volar, no tienes alas como los pájaros?
- Sí, las hice yo mismo con: plumas, hilo y cera.
- Pero te falta destreza.
- Ya, practicaré todos los días hasta que me salga bien.
- ¿Qué pensará tu padre de esto?
- No lo sé.
Al día siguiente le dan la sorpresa de permitírselo; lo celebran todos juntos... Y él se viste rápidamente para ir a practicar.
Laura
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