En esta noticia hablaremos de un evento que ocurrió hace tiempo: en la hora del recreo era imposible no ver a alguien con cartas de pokémon.
Nos encantaban ya que podías cambiarlas o hacer combates con ellas. Hasta que pasó algo: extrañamente, dejaron de usarlas y ahora ya nadie las utiliza.
Puede que con las cartas de Dragon Ball vaya a pasar lo mismo: "De todo a nada".
Luis Mirás