Una vez sentí mucho miedo; os lo voy a contar.
Por la noche, cuando estaba durmiendo, oí un ruido y me desperté; había alguien en mi casa.
Entonces, escuché una voz que decía sin parar: ¡Eric!
No eran ni mi madre ni mi abuela. Esto es lo que atemorizó.
Eric
No hay comentarios:
Publicar un comentario