Masha es una niña que tiene dos añitos, por eso es tan bajita. Sus ojos son azules como el cielo y su pelo rubio como el oro.
Lleva siempre un vestido con una pañoleta a juego y zapatillas.
Su carácter es alegre, muy traviesa, amable y ¡MUY DIVERTIDA!
Le gusta mucho hacer travesuras.
Oso es todo lo contrario: muy grande. Tiene ojos marrones como el chocolate y con un pelaje castaño oscuro.
No lleva ropa porque es un animal, ni zapatos ni zapatillas.
Es muy responsable y está continuamente pendiente de su amiga.
Omnívoro, come de todo, le encanta la miel y la mermelada de frutas.
Toca muy bien el piano y le enseña a Masha a realizar un montón de cosas.
Un buen día, Oso salió a por moras y se encontró con un piano. Se lo llevó para casa, tocó en él; pero estaba estropeado, así que pensó cómo lo podía arreglar. Después de mucho esfuerzo, por fin lo consiguió y sonaba muy bien.
La niña le preguntó qué era aquello; la puso a tocar y le salía fatal, no sabía.
Le colocó un libro para que tocara bien y le enseñó la escala musical; no había forma, sólo la pudo tocar con dos dedos.
De repente empezó una melodía increíble, él estaba impresionado. Resultó que estaba soñando.
Finalmente, le dijo que nada de dormir: ¡A trabajar!
Ella, con cara de cansancio, pensó que lo de estudiar era un aburrimiento.
Ariana
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