De repente empezó a sonar la música por los altavoces. Todos nos pusimos de pie cuando vimos aparecer las focas y los leones marinos. Sus pelajes eran grises y marrones.
¡Olía a pescado!
¡Olía a pescado!
Tras treinta minutos de actuación, las focas se estaban despidiendo del público; cuando en ese momento: ¡Plasss!¡Plasss! Nos salpicaron a todos los de la primera fila. Quedamos totalmente empapados. En un primer momento no me gustó nada, pero al final me reí un montón.
Óscar
No hay comentarios:
Publicar un comentario