miércoles, 30 de noviembre de 2011

"El viaje"


Érase una vez una gaviota que quería viajar.
Un día, un enorme barco llamado "El Viajero" llegó al puerto y una persona gritó:
"¡Los viajeros que suban a bordo!
Y la gaviota se posó en una de sus chimeneas. Media hora después, el barco arrancó y el ave se emocionó.

Pasado un tiempo, el barco paró en Río de Janeiro. Allí conoció a un lagarto muy simpático, al que le preguntó si quería ir con ella por el mundo, y su respuesta fue afirmativa.

A continuación, llegaron a un aeropuerto y subieron a un avión con destino a China, donde conocieron a un insecto muy raro y curioso que les propuso dirigirse a Londres, lugar en el que decidieron quedarse a vivir definitivamente.

Rubén

jueves, 24 de noviembre de 2011

"El tesoro del dragón rojo"

Érase una vez un niño que vivía en un pueblo en el sur del lago Michigan.

Un día, mientras paseaba por la orilla, vio un viejo barco de vapor. Se subió y se puso a investigar, descubrió un mapa que ponía:

"Mapa del tesoro del dragón rojo".

Salió corriendo a buscar a sus amigos. Una hora después, estaban en marcha. De repente el barco se paró, y uno de ellos dijo: "No quedará carbón en la caldera".
Bajaron a la caldera y descubrieron que había un zombie.
El más valiente bajó y descubrió que era un uniforme colgado de un perchero con ruedas.

Cuando estaban llegando a la isla, se apagaron las luces; vieron llamaradas y chispas entre unas nubes, y también oyeron disparos. Se trataba de un dragón peleando con un avión militar.
Aceleraron al máximo y, ya en la playa, descubrieron una cueva oscura y húmeda, entraron y oyeron:

"Encontraremos el tesoro y seremos muy ricos. ¡Ja, ja, ja!"

Se encendieron unas luces y vieron montañas y montañas de monedas de oro y plata.

Estaban tan asombrados que un estruendo les hizo volver a la realidad. Un avión gigante aterrizó en la playa, las personas se dirigieron a la cueva y empezaron a llevar las monedas. Los pilotos les avisaron: "No se puede cargar tanto". Por ello, pidieron refuerzo para que les enviasen otro más grande y potente.
Poco después, llegó un aparato gigantesco, con cuatro motores de hélice en cada ala.

Cuando iban a despegar, los niños encontraron una avioneta, arrancaron el motor y empezaron a perseguirlo. El problema fue que se cabó la gasolina y no consiguieron el mejor tesoro del mundo; pero, como exclamó uno de ellos: "Tenemos la mejor historia del mundo!

Rubén

martes, 22 de noviembre de 2011

"Dos familias diferentes"


Mi padre es músico y toca el saxofón, mi madre es restauradora de cuadros, mi hermana y yo estudiamos Primaria.
Me gusta tocar la guitarra y jugar al fútbol.
Tenemos un hámster que se llama Nieve.
Los fines de semana vamos a Vigo, donde están mis abuelos; o a Ponteareas, donde tenemos una casa y lo pasamos genial. Allí, a veces, damos un paseo por un río que hay cerca.



Mi padre es rico, un músico famoso. Mi madre es la mejor restauradora y da conferencias por todo el mundo. Soy futbolista y juego en la selección española y el Barcelona. Mi hermana es pintora y dibuja las mejores obras de arte.
Tenemos un perro al que le gusta jugar a perseguir la pelota.


Martín




Tengo una madre que se llama Elizabeth, trabaja de empleada de hogar. Mi padre crea y prueba programas informáticos. Mi hermana mayor se llama Noelia, y trabaja como mi madre. Mi hermano Braian es panadero. Mi hermano Maicol ayuda limpiando la casa y haciendo la comida. Mi hermanita Saray va al colegio.



Mi madre es presentadora en los informativos; y cocina en un restaurante de cinco estrellas, donde también trabaja mi hermano. Mi padre fue quien creó los mejores programas informáticos. Mi hermana mayor trabaja de modelo. Mi otro hermano es músico. La pequeña es tan inteligente que va a la universidad, y sólo tiene tres años.


Kevin




Mi papá se llama José Luís, trabaja de chófer, aunque ahora está en el paro.
Mi mamá se llama María José, trabaja como camarera en un centro tutelar de menores.
Mi hermano se llama Diego. Va a una autoescuela para sacar el carné de conducir; también le gusta jugar con su bicicleta.
Yo soy Gabriela, estoy en Primaria.




Mi familia tiene poderes. Mi papá el de mover las cosas, por lo que no se desplaza para ir a la compra ni para un paseo... ¡Ya lo hace mentalmente!
Mi mamá puede correr una carrera en menos de dos segundos y caminar por encima del agua.
Mi hermano es capaz de crecer los metros que desee para llegar a cualquier sitio.
Yo puedo volar a la velocidad de la luz para no tardar y para que no me puedan pillar.

Gabriela


miércoles, 9 de noviembre de 2011

"Mis gustos"


Cuando era pequeña, me gustaba jugar con mi amiga Candela, disfrazarme y pintarme con las pinturas de mi madre.
Un día por la noche estaba durmiendo, mis padres estaban viendo una película y escucharon un ruido en el baño: ¡Era yo que me estaba pintando con el maquillaje de mi madre!

Me encanta ir a casa de mis familiares, a comer y a veces a dormir. ¡Qué bien lo paso con los chistes que cuentan!

Disfruto yendo de vacaciones: Disneyland, Venecia y Ciudad Rodrigo, en donde viven mis bisabuelos.

Aprovecho los sábados para ir a clases de equitación con: Cosia, Capitán y Bruno, animales muy hermosos.

Voy a tener un primo en marzo y va a vivir en el mismo edificio que yo. Aunque tengo una hermanita pequeña, como me encantan los bebés, voy a poder ver lo que se siente.

Alma

viernes, 4 de noviembre de 2011

"Las almas vampiras"



Érase una vez dos adolescentes y su niñera vampiro, que era buena; también un chico llamado Rory, aunque él no lo sabía.
Los demás vampiros, malignos, desenterraron la caja "guarda-almas" que estaba en el cementerio. Antes de ver una película iban mordiendo a la gente para que sus almas fueran suyas y se las entregaban a sus antepasados durante los eclipses.

Los niños persiguen a uno para quitarle la caja, pero él coge a su niñera por el cuello. La abuela de uno de ellos le lanza un hechizo y las almas volvieron a sus cuerpos; y a él lo destruyen como a sus amigos.

Ángel

miércoles, 2 de noviembre de 2011

"¡Cómo me gusta el cine!"


En el cine vi muchas películas como: "Up", "Bolt", "Hannah Montana", "Never say never", "Phineas y Ferb", "Los Pitufos"...

Me gustan las de acción, aquéllas que son muy divertidas y los personajes son simpáticos.

Disfruto yendo, porque hay una pantalla muy grande, que permite ver muy bien, se oye de maravilla... ¡Y hasta se pueden ver en tres dimensiones!
¡Me encanta!

Sara

"¡Vaya fiesta!"





En una fiesta de Halloween había muchos monstruos diferentes; entre ellos, ocho colegas distintos. Estaban ayudando a la Muerte en la celebración.
El hombre lobo era muy chistoso y le encantaba asustar, con sus ojos rojos. Era muy peludo y rápido. La bruja le gastaba alguna bromita y paraba; ella era fea, pero muy lista, le encantaba hacer pociones mágicas para su colección de magia y jugar con ellas con el fantasma. Este tenía suerte porque no le afectaban. Era blanco y sólo se veía por sus enormes ojos azules y una boca morada. El zombie era más verde que un roble; era un poco tonto, porque no tenía cerebro. Menos mal que la momia le ayudaba a andar, a comer... Ella, muy servicial, estaba envuelta con seda y papel, aunque si la desvendabas, producía un asco horrible. Además, el hombre calabaza era un as haciendo trucos y dejaba impresionados a todos.

De repente, un espectro con capa vino y les dijo:
- Unos cazadores os persiguen, id al refugio y coged la estrella de la verdad para meterla en la caja mágica.
- ¿Qué? - Preguntan los amigos.
- Miremos en mi "Espectror 2000", "La joya y la caja de la verdad", ¡El sendero de los misterios!. - Dice el hombre calabaza.
- ¿Qué? - Preguntan otra vez.
- El camino al refugio. - Les explica la bruja.
- ¡Aaaah! - Se aclaran por fin todos.
- Habrá que ir. - Dice el vampiro.
- ¡Todos para uno, uno para todos!
Y se ponen en marcha hacia el refugio para lo que sea.

Por el camino se cuentan chistes y comen frutas. Echan de menos la fiesta. Cuando ven una torre, suben a jugar y se hace muy tarde, así que duermen allí; pero el hombre lobo y el zombie no les dejan con sus bromas.
Al despertarse, un dragón los tiene rodeados y no pueden salir; pero la Muerte hizo un portal y lo evitaron.
La momia les dice:
- ¿Por qué no nos llevaste al refugio?
- Porque... No se me ocurrió, no me queda energía, así que sigamos. ¡Todos para uno y uno para todos!
- ¡Lo malo es eso! - Dice la momia.
- ¿El qué? - Preguntan los monstruos.
- Me llamo Samaín.
Entonces los mata.

Jorge